martes, 17 de junio de 2014

Particularidades de una sucesión histórica

Con su abdicación, anunciada el pasado 2 de Junio, SM Don Juan Carlos I de Borbón y Borbón, Rey de España, ha  puesto en marcha una serie de cambios históricos que, juntos, abrirán la puerta a una nueva forma de entender y vivir una de las más antiguas e importantes monarquías europeas. Plagada de interrupciones, enfrentamientos y numerosos escándalos, con más de cuatro siglos en un trono sobre el que se han sentado, siempre, descendientes de la misma familia, aunque entrelazados tantas veces y mezclados de tal manera, que casi se hace imposible seguirles el rastro, sobre todo porque, tal vez como en ninguna otra familia de noble estirpe, se han realizado muchos matrimonios que aseguren la “limpieza de sangre” de los descendientes. Es un hecho lleno de detalles inéditos (no existe una situación similar de la que echar mano en tiempos relativamente cercanos) que en si mismos escriben una página desconocida hasta ahora,  a pesar que siete reyes Españoles han abdicado, aun cuando solo cuatro lo hayan hecho de manera voluntaria.  En la historia reciente, la monarquía fue parcialmente abolida por el dictador Francisco Franco, quien no aceptaba nadie que pudiera hacerle sombra a su “incuestionable” poder. Reinstalada en el trono después de su muerte por decisión suya, ni los últimos años del siglo anterior, ni los primeros de este,  han conocido un relevo en la corona y no lo esperaban hasta el momento de la muerte del Rey, quien había asegurado en múltiples oportunidades que “moriría en el trono”.  Sean cualesquiera que sean las razones verdaderas para esta transición, tomarla ha sido probablemente el acto  más valiente y humilde de un rey que siempre ha puesto por delante los intereses de España. Sin embargo, ha significado también una serie importante de otros cambios, que sin duda alguna escribirán un nuevo capítulo en la historia de España. Veamos algunas particularidades:
-          A diferencia de SM la Reina Sofía, nacida Princesa de Grecia y Dinamarca y “prima” de casi todas las testas coronadas de Europa, la nueva reina, SAR Doña Letizia Ortiz Rocasolano (actual Princesa de Asturias) no tiene ni una gota de “sangre azul” en su árbol genealógico. Es hija de una enfermera y un periodista con cierto renombre, nieta de un taxista madrileño y una famosa locutora de radio Asturiana. Es una mujer muy guapa, inteligente y estupendamente preparada para el cargo, después de 10 años de matrimonio con el Príncipe de Asturias, aunque no disfruta de la popularidad de su marido o de otros miembros de la familia real.
-          Para hacerle todos los honores al valor de las instituciones democráticas, SM el Rey Juan Carlos I planificó la abdicación cuidadosamente y para ello contó todo el tiempo con la participación de altos mandos del gobierno y de la política nacional. La primera persona a quien notificó la decisión formalmente tomada, fue al presidente del Gobierno y fue este quien lo anunció al pueblo español.
-          Aun cuando SAR Felipe, Príncipe de Asturias,  no es el hijo mayor de los Reyes, (la primera hija es la Infanta Elena) es él quien sucederá a su padre en el cargo, debido a que España es uno de los pocos países monarquicos en los que la sucesión de la corona está reservada al primer hijo varón por encima de las hijas hembras. No se trata de una Ley Sálica, que, como bien ha aclarado un lector interesado, realmente nunca existió en España; es, mas bien, un resabio de la ley de Sucesión Fundamental - también abolida - cuyos coletazos marcan la constitución de 1978 (Franquista) y estipulan los derechos sucesorios de la Corona Española.
-          Al ascender al trono Felipe VI, la composición actual de la “Familia Real” cambiará por completo. Las Infantas Elena y Cristina pasaran de ser hijas de rey a ser hermanas de rey, por lo tanto ya no serán parte de la familia real. Conservarán sus títulos y su distinción de Grandes de España, pero estarán eximidas de funciones oficiales y sueldos honorarios. Sus hijos también. Sus familias se convertirán en “parientes del rey” con la alcurnia que eso significa, pero sin mayores honores reales.
-          Las hermanas del actual rey, Doña Pilar y Doña Margarita, Infantas de España, conservarán sus títulos nobiliarios pues los heredaron de su padre, Don Juan de Barcelona, (heredero que no llegó a reinar por disposición de Franco) quien a su vez se los transmitió a través del Rey Alfonso XIII.
-          Los reyes salientes conservaran el titulo honorifico de Rey y Reina, el trato de Alteza Real y los honores correspondientes.
-          Los nuevos reyes, Príncipes de Asturias, pasarán de recibir el tratamiento de Altezas Reales al de Majestades, título reservado exclusivamente para el rey en ejercicio. Igualmente, el protocolo manda que sean tratados en tercera persona y nunca se les dirija la palabra directamente, a menos que ellos lo permitan expresamente.
-          El Rey saliente conservará el rango de Capitán General de las Fuerzas Armadas (en reserva) y su derecho a lucir uniforme militar, así como el trato preferencial correspondiente.
-          Por lo pronto no habrá cambio de residencias. SSAARR Don Juan Carlos y Doña Sofía continuaran habitando el “Palacio de la Zarzuela” y SSMM los Reyes Don Felipe y Doña Letizia continuarán habitando la “Casa del Príncipe” una nueva y moderna residencia construida en los terrenos de la Zarzuela, donde han habitado desde su matrimonio. Para ocasiones oficiales y eventos de estado utilizarán el Palacio Real.

-          La pequeña hija de SSMM Don Felipe y Doña Letizia, SAR La Infanta Leonor de Borbón y Ortiz, recibirá, inmediatamente al momento de proclamación de su padre, el título de Princesa de Asturias (título honorifico reservado al heredero de la Corona Española) pero, si sucediera algo al nuevo Rey, y aunque podrá ser proclamada Reina, es una asignatura pendiente de las cortes la enmienda constitucional que iguale sus derechos, garantizados solo por el hecho - fortuito - de que en el matrimonio del Rey no ha habido un hijo varón (parece que no lo habrá) y en la constitución española (como lo explico arriba) el orden sucesorio sigue recayendo en el hijo varón de los reyes a despecho de la existencia de la cantidad que sea de hijas hembras y de su orden de nacimiento; si naciera un nuevo hijo y este fuera varón, SM el Rey Felipe VI podría perfectamente mantener el orden sucesorio y otorgar preeminencia de heredero a este hijo.
-          Las funciones oficiales y beneficios de cualquier tipo otorgados a los reyes salientes, además de sus honores y títulos sancionados por ley emanada del Congreso Español, serán decisión expresa del nuevo Rey.
-          A los actos de proclamación de SM Felipe VI no asistirán, por decisión del gobierno español, ni jefes de estado extranjeros ni representantes de ninguna Casa Real de Europa o el mundo.  La razón esgrimida es el carácter sencillo y discreto de las ceremonias de sucesión; sin embargo, al finalizar las ceremonias oficiales, los nuevos Reyes ofrecerán una recepción en el Palacio Real a la que asistirán dos mil invitados, lo más granado y florido de la sociedad y la aristocracia española. Las Casas Reales extranjeras estarán representadas por sus embajadores respectivos.
-          El reinado de SM Felipe VI, empezará efectivamente a las 00.00 horas del 19 de junio, pues a esa hora entrará en vigencia la ley de abdicación que habrá sancionado su padre, SM Don Juan Carlos I, la tarde del día 18. Por lo tanto,  él y Doña Letizia ya serán Reyes cuando entren en el Congreso de los Diputados para el acto de proclamación (es incorrecto hablar de coronación, pues tal cosa no sucederá debido a la separación de  poderes del gobierno democrático)
-           Don Felipe, vestirá el uniforme de capitán general de los Ejércitos, como jefe supremo de las Fuerzas Armadas y  entrará por la Puerta de los Leones para efectuar el  mismo recorrido que hizo su padre en 1975. Serán acompañados por las autoridades españolas: el presidente del Congreso, Jesús Posada; el presidente del senado, Pío García Escudero y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
-          Cuando SM Don Felipe VI preste juramento, se colocarán sobre un cojín a poca distancia del sillón del trono, el cetro y la corona, símbolos de la monarquía española que se utilizan desde la reina Isabel II. Pero, no habrá junto a ellos un crucifijo.
-          La familia de la nueva reina, (padres y hermanos) serán invitados especiales en el acto de proclamación y lógicamente, se espera que tengan alguna presencia más activa en el nuevo reinado, pero no recibirán trato especial alguno, sueldo o  título honorario o nobiliario, ni funciones oficiales de ningún tipo.


1 comentario:

  1. Estimado Carlos:
    Menciona de forma incorrecta var en su post que en España está vigente la ley Sálica, de hecho, nunca lo ha estado realmente.
    Con la Llegada de los Borbones al trono de España en la persona de Felipe V, éste trató de implantar una ley Sálica al estilo de la que regía en Francia. Ante la oposición de la cortes de Castilla, se instauró la Ley de Sucesión Fundamental, por la que las mujeres podrían heredar el trono aunque únicamente de no haber herederos varones en la línea principal (hijos) o lateral (hermanos y sobrinos). (En la Ley Sálica quedan excluidas en todo caso).
    Adicionalmente, en 1830 Fernando VII, aprobó una Pragmática Sanción que ponía en vigor la de 1789 de su padre Carlos IV, que anulaba dicha Ley de Sucesión Fundamental.
    No obstante, la España actual se rige por las leyes que emanan de la Constitución de 1978 que, en su artículo 57, establece el orden de sucesión a la Corona estableciendo la preferencia en orden del varon sobre la mujer pero no excluyendo a ésta.
    Asi pues, pese a que sería conveniente reformar este arículo para eliminar dicha desigualdad, no sería necesario ningún cambio legal para que la princesa Leonor pudiera suceder a su padre, siempre y cuando no se produzca el nacimiento de un hermano varón.

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